7 de mayo de 2019

No hay que dejar de ser niño
hay que jugar
hay que crear
hay que permitirse emocionar
hay que derramar inocencia
hay que poner el corazón sobre la mente
hay que reir sin intelectualizar
hay que llorar por llorar nomás
porque el alma necesita ser vaciada
porque el alma debe alimentarse también
porque el alma no tiene por que envejecer.
No hay que dejar de ser niño.
Nunca jamás.